Foto: Iván Soca.
Hasta la calle 25, esquina a Hospital, llegaron como siempre, cubanos de diversas edades y regiones, no solo de la capital. A ellos que se sumaron mexicanos, españoles, peruanos, argentinos, chilenos y hasta 14 maestros colombianos que visitan Cuba por vez primera, quienes confesaron ser fieles seguidores del autor de Por quien merece amor.
Al inicio de la presentación, el trovador rememoró la importancia que tenía ese barrio en su vida, los amigos entrañables que hizo y de la casa donde por algunos años vivió su madre, a pocos metros del escenario. Se refirió a la cercanía a Radio Progreso, emisora que le acogió en sus inicios y donde compartió en varias ocasiones, con los invitados a su concierto.
Durante una hora Silvio, acompañado de los músicos Niurka González, Oliver Valdés, Jorge Aragón, Jorge Reyes y Emilio Vega, deleitó con 17 temas de su autoría, a un auditorio entre los que se encontraban el maestro Leo Brouwer, los trovadores Augusto Blanca, Marta Campos, Heidy Igualada y la joven intérprete y violinista Tammy López.
Nuevamente la música y la poesía, se apoderaron de los espacios humanos intangibles e hicieron alzar las voces de los presentes, sobre todo, en temas como Óleo de mujer con sombrero, Quién fuera, El necio, La era está pariendo un corazón, Ángel para un final y Ojalá, este último, marcando el final de la primera parte de esta presentación.
Luego, subió al escenario el poeta Víctor Casaus, para como es habitual, en esta la gira interminable, dar a conocer la donación de libros a la Escuela Secundaria Básica, de la comunidad, Mártires de Humboldt.
De inmediato, el también director del Centro Pablo de la Torriente Brau, presentó al repentista, escritor, investigador y docente cubano Alexis Díaz Pimienta, quien una vez más, conmovió al auditorio, con sus versos improvisados y probada autenticidad, logrando un estado de optimismo y alegría colectivos
Al concluir Díaz Pimienta, regresó al escenario Rodríguez, esta vez para dar paso a la Orquesta Aragón, promovida como invitada especial de este encuentro y de la cual, aseveró, hablar de ella, significaba hablar de verdaderas raíces y esencias, de la música cubana, por ello la presentaba con respeto y mucho cariño.
Ante los primeros acordes, el público quedó sorprendido al escuchar al trovador en unión de la orquesta que este año celebra su aniversario 78 de existencia y que ha hecho bailar a tantas generaciones de cubanos y extranjeros, interpretar una nueva versión de El Mayor, tema agradecido y también coreado por parte de los asistentes.
Comenzó así, la segunda parte de un concierto memorable, en el que además de disfrutar de temas emblemáticos y de gran popularidad, que forman parte del repertorio de Aragón como, Encarnación, Sabrosona, Chaleco, Pregúntame ¿como estoy?, Nosotros, El bodeguero y Pare Cochero, que provocaron el baile colectivo, el público fue testigo de las interpretaciones magistrales y la versatilidad de Niurka González, quien con su flauta, se unió a la orquesta en los danzones Flauta mágica creado por Alfredo Valdés Brito y Antonio María Romeu y de Fefita de la autoría de Odilio Urfé.
Vuelve Silvio, en su misión de educador, en la gira interminable por los barrios, a señalar la importancia de mantener el orgullo por la diversidad y calidad de la música cubana. Nuevamente muestra, a través de sus protagonistas, que puede promoverse con expresiones y hechos artísticos incuestionables, la cubanía, que se puede en un mismo espacio, cantar con él y su tropa, bailar con la orquesta Aragón y por si fuera poco, conmover a cientos de personas, con el repentismo de Alexis Díaz Pimienta.
A pocos días de que finalice el año 2017, Silvio nos enseña y nos conduce una vez más, por un camino, que va desde el barrio, hacia los valores incuestionables de toda la nación.
Foto: Iván Soca.
Foto: Iván Soca.
Foto: Iván Soca.
Foto: Iván Soca.
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Foto: Iván Soca.
TOMADO DE CUBADEBATE
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