Por:
Marianela Dufflar, Iván Soca
Hay artistas que tienen la cualidad a través de su obra de probados valores estéticos y musicales, de encantar al público. De crear una magia intangible, que tiene que ver mucho con adentrarse en los sentimientos, logrando provocar solidaridad, ternura, ingenuidad y amor.
Eso y mucho más, sucedieron este viernes en el Parque Nguyen Van Troi, conocido como Parque de La Normal, del Municipio Cerro de la capital cubana, en el concierto 87 de la Gira por los barrios de Silvio Rodríguez, que contó además, con la actuación especial de la compañía de teatro infantil, La Colmenita.
El autor de Unicornio aseveró en sus palabras iniciales, que el concierto formaba parte de los festejos por el Día Universal del niño, que celebrará como cada año, el Fondo de las Naciones Unidas para la infancia (UNICEF) en Cuba, el próximo 20 de noviembre y por el 28 Aniversario de la Convención de los derechos del niño.
Por ello dedicó la presentación a todos los niños y niñas del Cerro, de Cuba y de todo el mundo, sumándose a la UNICEF y La Colmenita.
El día de los niños -dijo el trovador- es muy importante. Gracias a la revolución vivimos en un país que ha hecho y sigue haciendo mucho por sus niños y jóvenes, en las esferas de la salud, la enseñanza, el deporte, la cultura. Los cubanos sentimos orgullo de que nuestros niños, sean la parte de la sociedad, más protegidos, pero aún quedan muchos desafíos a la humanidad, por eso tenemos que seguir comprometiéndonos a poner siempre a las niñas y a los niños primero.
La gira por los barrios, reafirmó Silvio, dedica este concierto a todas las niñas, niños y adolescentes cubanos y del mundo. Ellas y ellos, son el futuro.Pero, ojo, que también son presente,escuchemos sus opiniones y trabajemos junto a ellos,para lograr un mundo y una Cuba, mejores.
Al concluir estas palabras el trovador cubano, presentó a María Machicado, representante de la UNICEF en Cuba, quien agradeció a Silvio y a su tropa, la colaboración y dedicación de este concierto.
Luego de lo anterior, comenzó la magia. El canto, la poesía, los textos y las melodías del poeta trovador, unido a Niurka González, Rachid López, Michel Elizarde, Jorge Reyes y Oliver Valdés,(músicos que le imprimieron a cada armonía y arreglo, su magistral y personal talento), tocaron hondo en los corazones de las más de cuatro mil personas, entre ellas cientos de niños, que asistieron a la presentación.
Temas como Mi casa ha sido tomada por las flores, La canción de la Trova, El Papalote, Viene la cosa, El reparador de sueños, La Maza, El mayor, La gota de rocío, De la ausencia y de ti, Quien fuera y Escaramujo, este último, dedicado a la UNICEF, no solo fueron coreados, sino interpretados con vehemencia y ovacionados por la multitud.
Al concluir la primera parte del programa, Víctor Casaus, poeta y director del Centro Pablo de la Torriente Brau, dio a conocer la donación de libros a la Escuela Primaria Nguyen Van Troi de la comunidad, por parte del Instituto Cubano del Libro, el Centro Pablo, la Editorial Capitán San Luis, la Casa de las Américas, la Editora Abril, los Estudios Ojala y de inmediato, tuvo a su cargo la presentación de La Colmenita.
Desde los primeros acordes y la aparición en escena de los integrantes de la compañía infantil, liderada por Carlos Alberto Cremata, las energías de los artistas y del público crecieron.
Nuevamente los niños con su dominio escénico, vitalidad y cubanía, contagiaron a todos con su alegría, convirtiéndola en alegría colectiva.
Su espectáculo, conformado por canciones creadas por Silvio, Juan Formell y Adalberto Álvarez, hicieron demostrar que es posible la ternura, que la felicidad existe y que puede ser perdurable gracias a la solidaridad humana y a la defensa de los valores culturales de la nación.
Al concierto 87 de la Gira por los barrios acudieron gente del Cerro, de Centro Habana, 10 de octubre, Alamar, Marianao, La Lisa y hasta de Cojímar. A ellos se sumaron colombianos, mexicanos, puertorriqueños, españoles, peruanos, chilenos, argentinos, uruguayos y guatemaltecos.
Entre el público asistente, se encontraba el patriota puertorriqueño, Oscar López, así como los héroes de la República de Cuba, René González, Gerardo Hernández y Fernando González quienes fueron abordados con cariño y respeto, tanto por los niños como por todos los presentes.
Más de dos horas de música y razón para el alma, caracterizaron este motivador concierto de la gira interminable, donde Silvio, su tropa y La Colmenita, sembraron amor… vaya forma de saber que aún puede llover sobre mojado.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario