Yo tuve la suerte de ver la pieza con la actriz. Se emocionaron ella y la Dra. Lidia Inés Novoa, asesora de la serie. Yo le apreté el brazo a Rudy Mora, su director y guionista.
Luego Isabel me pidió que fuera a su casa para entrevistarla, que ella prefería conversar. Lo voy a hacer, no sólo por ConCiencia sino por todos los personajes increíbles que nos ha devuelto. Pero de ese capítulo me contó que la perfecta caída fue de varias tomas, ella quiso repetirlas hasta que quedó satisfecha.
Del guion, Rudy y Lidia Inés me contaron que cuando le dieron su historia, la actriz no dijo ni que sí, ni que no. Hizo un viaje y cuando regresó les enseñó un cartapacio de hojas en las que estaba todo lo que debía saber sobre la ataxia: desde los primeros temblores hasta la silla de ruedas.
Me debo esa entrevista, y les debo a ustedes las respuestas del director televisivo que anda en boca de todo el mundo hoy. Por ahora, aquí están las respuestas a las preguntas que le hice. Volveré sobre el tema con lo que diga Rudy y opiniones de otras personas.
Y que siga el debate, del diálogo sale la luz:
¿Esperabas una reacción que ha polarizado las opiniones?
-Sí, me parece lógico que sucediera, es el resultado mismo del trabajo mío y del equipo en el que incluyo desde el último asistente y el primer actor hasta los profesionales de la ciencia que me asesoraron. Además, puedo decir que por la reiteración, la polémica forma parte de mi labor profesional y no la procuro pero tampoco la desecho. Si al final de un largo período, un determinado proyecto transita por las pantallas, sea la grande o la chica de manera inadvertida, estoy seguro de que me sentiría triste.
“Te he expresado en ocasiones que creo imposible conseguir unanimidad en aprobación o desagrado cuando millones de espectadores con gustos y aspiraciones diferentes se convierten en dueños de una obra, de un solo producto; es un horario particular y con referencias que hoy ya no se pueden obviar. Paquita, me satisfacen y me ayudan las opiniones, todas, siempre que sean respetuosas, y creo que aportar a la reflexión, al debate, al pensamiento individual y colectivo, al mejoramiento espiritual, es una de las principales razones del trabajo”.
¿A qué atribuyes que se acepte al Dr. House, drogadicto, cruel, autocrático, y no se perdone a un cubano (o una cubana) de igual profesión que tenga un desliz?
-Interesante pregunta, como para un gran debate. Creo que la condición de televisión pública en nuestro país trae por consiguiente que esta se asocie a los espejos, es decir, que un alto porcentaje de nuestros espectadores, al observarla, deseen verse reflejados fielmente, y, si es posible, hermosos, más de lo que puedan ser, de lo contario… Olvidando que en determinados productos, el término “ficción” juega un rol definitorio pues como la misma palabra lo expresa, no se está ante un material didáctico, ni documental, ni de ningún género periodístico, sino de una recreación que puede (como en este caso), o no, partir de circunstancias realistas, por ejemplo, los procedimientos científicos.
“Es imprescindible rodear a los personajes que conducen una historia de elementos, actitudes, comportamientos positivos y negativos, que duden, que cometan errores, que acierten, que se enfrenten, que luchen, que triunfen y que fracasen para que existan conflictos, para que crezca la historia, para que se desarrolle la narración, para que mediante ellos se pueda criticar males e insuficiencias; la presencia de unos y otros representa a los seres humanos y también los superobjetivos de la obra.
“Las cuotas de estos ingredientes, las que fueran, siempre estarán listas para ser examinadas porque sucede como en el béisbol, hay cientos de capitanes de equipo, en la misma medida en que también existen muchos dramaturgos solo para las ficciones nacionales que supuestamente “conocen” cuál es la dosis exacta.
“Un personaje (profesional) en un audiovisual cubano para la TV, “cruel” y “autocrático”, como expresas en tu pregunta, tendría una mirada fustigadora con gran repercusión aunque su capacidad y resultados equilibraran una supuesta balanza. En el “espejo” que imagino, donde también se miran algunos gremios e instituciones, esa imagen sería inaceptable, pues la referencia dada por el amigo, el vecino, el conocido, y el ideal de lo que se quiere, lo justificaría. Pensar que siempre un personaje X de un lugar A sería la representación de Y, que alguien conoce y que trabaja en B, me parece un error, así como también suponer que dicho personaje X, que tiene rasgos y actitudes negativas, identifica a una comunidad C.
“Es cierto que en audiovisuales de ficción para la TV han faltado ideas que trasporten valores, eso es una problemática, pero también es real que no abundan personajes ricos en matices y sí muchos que solo son reproductores de palabras y objetivos. Y esta es otra: es cierto que no siempre se consigue calidad pero también es real que criterios muchas veces sin conocimiento ni responsabilidad, empañan mensajes positivos y aleccionadores bien intencionados expresados no de manera directa.
“Es indiscutible que personajes que se desenvuelven en mundos marginales a veces saturan, pero no es menos cierto que cualquier experto, por muy alto grado de instrucción y calificación que tenga, no deja nunca de ser un humano con virtudes y defectos, por lo que la trascendencia en cualquiera de los casos estaría en el saldo final. Parecen lejanos los tiempos en que personajes como el Tavo, de la serie Su propia guerra, machista, mujeriego y dado a la bebida pero luchador contra el delito, hacía empatía con todos a pesar de las debilidades en su conducta.
“Los productos nacionales no tienen en la actualidad, y creo no tendrán por mucho tiempo, una mirada noble con que se contemplan los productos extranjeros sea cual fuese la calidad de uno y de otro; sobre ellos pesará la pauta, la observación exhaustiva, los raceros y la comparación porque existen ‘televisiones en los bolsillos’.
“Seguirá preocupando más a nuestros espectadores que Indira, personaje de los capítulos 1 y 2, tenga bajas pasiones aunque después ponga por delante su responsabilidad, a que exista un homosexual como Crodoaldo Valerio, menospreciado por su condición, maltratado y humillado en la telenovela más reciente y que representa la negación de todas las campañas nacionales contra la homofobia, solo porque viene del lejano Brasil, o un Dr. House que se droga pero también viene de lejos, el primero expuesto tres veces a la semana durante mucho tiempo a la vista de niños, jóvenes y adultos en horario estelar. No obstante, Paquita, asumo el reto que se nos presenta trabajando más, preparándome más, sumando más inteligencias y respetando mucho más a los espectadores”.
¿No crees que si el guion lo hubiera escrito otra persona tal vez no habría tanto azar o personajes bendecidos por señor de Galilea?
-Eso no lo puedo asegurar, pero sí garantizo que en ConCiencia, la que tuve la suerte de escribir y dirigir, nada forma parte de un azar ni fuimos bendecidos por nadie, todo lo contrario, es el resultado de un largo proceso en el que intervinieron y se comprometieron muchos profesionales de los medios y de la ciencia con apoyo de RTV Comercial, representado por Joel Ortega y Adriana Moya.
A esta altura del juego, ¿todo lo harías igual o cambiarías escenas, planos?
-Estoy satisfecho con el resultado del trabajo colectivo, pero todo es perfectible porque forma parte del desarrollo natural. Si volviera a filmar… lo haría todo exactamente igual, al menos eso creo, ahora.
¿Por qué te gustan las series?
-Hasta hoy, es mi mejor manera de expresarme, artísticamente.
(Tomado de Portal de la Televisión Cubana)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario