Filmado en blanco y negro, el largometraje está ambientado en tres épocas diferentes: los últimos años de las décadas de 1950 y 1980, así como la conclusión de los noventas y la entrada del siglo XXI.
Con guión del propio Insausti y dirección musical de Juan Manuel Ceruto, la cinta refleja los conflictos de muchas personas ante la gloria ajena y tiene como escenario principal un club de jazz.
La endivia es un drama universal, de ahí el interés de su director en no circunscribir la película a un lugar determinado y dotarla de elementos que permitan mostrar una historia intemporal, capaz de funcionar en cualquier lugar del mundo.
En Club de jazz trabajan dos fotógrafos (Ángel Alderete y Alejandro Pérez), algo sin antecedentes en el cine cubano, precisó el también director del documental Existen (2005) y de la película Larga distancia (2010).
De acuerdo con el cineasta, las únicas similitudes que pueden tener Club de jazz y Larga distancia son algunos puntos en común relacionados con el rigor estético, la forma de filmar y de tratar las sombras.
En el nuevo filme de Insausti confluirá el talento de los actores Luis Alberto García, Héctor Noas, Mario Guerra, Claudia Valdés y Raúl Capote, entre otros, además servirá como carta de presentación de noveles intérpretes cubanos.
Al decir de su director, en Club de jazz reina la sombra, matizada con actuaciones contenidas porque las emociones están más bien a niveles viscerales.
Una amplia gama de grises contrastará con las escenas en blanco y negro de la cinta para ofrecer un espectáculo visual armonizado por el jazz, un género musical libre y espiritual según Insausti.
El rodaje de Club de jazz, filme que retrata la creación vista desde el dolor, la agonía y el drama de tres artistas, deberá concluir el próximo 15 de abril
(Con información de Prensa
Latina)
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